Esta semana ha sido la nueva edición de CODE. org. Una semana dedicada a promover, potenciar y difundir la necesidad de aprender un nuevo lenguaje, el de la programación. Las empresas que participan en este evento son muchas, Microsoft, Amazon, Apple... Esta última además de permitir desde su acceso mediante la posibilidad de trabajar desde casa y obtener después un certificado, daba la posibilidad de una taller para iniciarte en el CODE en sus Apple Stores.
Me dedico a la enseñanza y una de las opciones que ofrecía era para educadores. Nos permitía la posibilidad de, con un trabajo previo por nuestra parte, poder realizar una sesión en clase con todos los alumnos, con distintos modos de trabajo. La idea me pareció genial, y tal vez la lleve a cabo en otra ocasión, aunque primero tendré que aprender yo. Lo que me sorprende es que yo, que enseño Lengua castellana y Literatura, me entusiasme con una idea así y que quienes enseñan informática no sepan ni de qué hablo.
Es cierto que nuestro sistema educativo hace aguas, pues en el momento en que quienes educan no tienen intereses en los nuevos avances qué podemos transmitir a nuestros alumnos, desde luego el entusiasmo de aprender para mejorar el mundo no, solo la necesidad de conocer lo justo para seguir como hasta ahora. Habrá quienes piensen que no es mala cosa, y es cierto las hay peores, pero también mejores y eso es lo que tenemos que potenciar, el entusiasmo por aprender, por trabajar por algo mejor, por seguir teniendo curiosidad... eso es lo que mueve el mundo de ahora y no hacerlo supone el estancamiento. Si todos remáramos en el mismo sentido tal vez las voces que arremeten contra la educación pública no tendrían ni razones, ni sentido, ni habría oídos dispuestos a escucharlos.
